Dicen los ecologistas que estamos creando las condicones para un futuro ecofascista, es decir, un futuro donde los ecosistemas naturales están tan dañados que someterán a las poblaciones a condiciones ecológicamente restrictivas. Los economistas hablan de un futuro laboral más precario y una mayor incertidumbre. Ambos enfoques hablan de dictaduras a largo plazo. Por no hablar del futuro de las libertades y el bienestar conquistado en algunas sociedades. Así, ante este panorama, surgen iniciativas como intergenerationaljustice que giran en torno a la obligación moral que tienen las generaciones que gobiernan hoy el mundo de garantizar a las generaciones futuras, por lo menos, las mismas condiciones y oportunidades de las que gozamos hoy en día. Se trata de incluir el pensamiento a largo plazo en las decisiones que tomamos, las posibles repercusiones sobre los que vendrán, que también tienen derechos, muy en la línea de The long now. Así se publica Intergenerational Justice Review, una revista que aborda la justicia intergeneracional desde el punto de vista de la ciencia política, el derecho y la ley.