viernes, 18 de noviembre de 2011

adbusting a la española

En ese interesante libro llamado "Rebelarse Vende" se habla del negocio que supone la contracultura. Se describe cómo el sistema de consumo, ante la rebeldía contracultural que lo cuestiona, lejos de debilitarse, se hace más fuerte, ya que logra apropiarse de los signos de la rebelión y empaquetarlos como objetos de consumo. La  cara del Ché en la portada del libro habla por si misma. Hay quien postula que el coolhunting es el estudio de la contracultura, de los rebeldes y outsiders, que como son inconformistas por naturaleza siempre están innovando y creando algo nuevo. Las ideas, los nuevos estilos de vida, las tendencias siempre surgen de estas minorías que no gustan de pensar y vivir como la mayoría y no tienen más remedio que inventar nuevas formas de vivir en el mundo y nuevas maneras de pensarlo.
Por eso los de teléfónica han creado una campaña donde se representa una especie de asamblea de estética 15-M. Es una manera de utilizar la estética de la rebeldía para vender más móviles y conexiones, verdadero ejemplo de cómo el consumo se apropia de los signos del inconformismo y los utiliza para promover todo lo contrario. Pero el tiro les ha salido por la culata. Han olvidado que muchas personas son ya conscientes de las prácticas de la publicidad y el marketing,  que hay mucho consumidor vigilante y muchos otros que no sólo critican la sociedad de consumo sino que emprenden, armados de nuevas tecnologías y redes sociales a su disposición, el camino activista. Así surgen el espíritu adbuster del cultural jamming .Y este viral anti-anuncio es todo un ejemplo a la española.