Es curioso cómo parte de nuestra manera de ser es nuestra manera de percibir. La otra parte es nuestra manera de encajarlo. Una es cognitiva y la otra emocional. La cuestión es que me parece interesante que podamos hablar de ciertas personalidades como más proclives a captar las tendencias o a pronosticar el futuro más acertadamente que el resto. Aquí es útil recordar al erizo y a la zorra a la manera de Isaiah Berlin. El erizo es bueno en una cosa, en su defensiva. El zorro no está especializado en nada en concreto pero se las apaña muy bien en diferentes terrenos. La personalidad eriza tendría una gran ideología o ideología dura (marxismo, neoliberlaismo, psicoanálisis) mientras que el zorro no se siente satisfecho con modelos poco flexibles que intentan explicarlo todo de un plumazo y busca micromaneras de encontrar sentido.De alguna manera el zorro hace un constante collage de su sistema cognitivo...
El erizo explica el mundo desde un solo punto de vista y el zorro escoje los aciertos de esos puntos de vista unidimensionales para obtener así una visión menos concreta pero más amplia del mundo. Es decir, mientras que los erizos confían demasiado en su sistema cognitivo y en las ideologías que abrazan, los zorros dudan más de sí mismos y desconfían de los metarrelatos. Así pués el erizo aparece más seguro a la hora de explicar el mundo mientras que los zorros se muestran más escépticos y dubitativos. De esta manera el erizo no tiene que afinar su instrumento perceptivos, ¿quien iba a ir al oculista si piensa que ve bien? Mientras, el zorro está ajustando siempre su sistema cognitivo a la realidad y sus pequeños cambios. A los erizos les ciega su propia manera de ver las cosas. A loz zorros de alguna manera les obliga a estar más atentos.
La cuestión es que parece ser -según este artículo- que los zorros, aunque duden todo el rato y utilicen muchos "sin embargos", obtienen mejores resultados a la hora de predecir el futuro. Pero son los erizos los que más confían en sus predicciones. Así pues desconfía de aquel con tanta seguridad, desconfía del erizo.